No es la primera que os enseño en grande alguna foto de los infiernos de Beppu, de los que os estamos hablando con más detalle en Japonismo. Me gustan como motivo fotográfico porque varios de ellos son muy fotogénicos y en el tamaño del blog, las fotos se disfrutan más. En este caso, os muestro el Chi-no-ike jigoku o infierno del estanque de sangre, que me parece una preciosidad.

Los estanques de este infierno contienen barro de color rojizo compuesto de óxidos de elementos como el hierro, manganeso y aluminio, y se encuentra a una temperatura de 78 grados centígrados. Merece mucho la pena visitarlo porque si en foto es chulo, en directo impacta aún más con su intenso color rojo.