Hace no demasiado ya os puse una foto del Umi-jigoku, uno de los infiernos que hay en la ciudad balneario de Beppu, al sur de Japón, y antes de eso, otra del Shiraike jigoku (si recordáis, os hablé en líneas generales de estos infiernos en Japonismo). Hoy os traigo otra foto de otros de los infiernos, en este caso el Oniishibozu-jigoku, que traducido significa «Infierno de la cabeza afeitada del monje».

Y tal vez os preguntéis que por qué recibe ese nombre tan curioso, y es que si veis la foto, veréis que se forman burbujas perfectamente lisas y esféricas, que asemejan a las cabezas afeitadas de los monjes. Espero, eso sí, que los monjes huelan algo mejor que este infierno, porque aunque es muy curioso de ver, el olor a azufre impregna todo el Oniishibozu jigoku.